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viernes, 3 de enero de 2014

¿Quiénes escriben la Historia?



Está claro que la Historia la escriben los vencedores de las guerras, y en los períodos de paz, los que detentan el poder y el dinero. Algunos investigadores, como David Irving, controvertido autor, escriben sobre la Otra Historia.



   Hitler no levantó el movimiento nacionalsocialista en Alemania gracias a un capricho electoral, sino gracias a la gente, la misma que le dio, en su gran mayoría, su apoyo incondicional hasta el último día.
   Una vez en el gobierno, aboliría la guerra de clases del siglo XIX para crear una Alemania con igualdad de oportunidades para obreros e intelectuales, para ricos y para pobres.
   “El cargo de Presidente del Reich se une al de Canciller del Reich. En consecuencia, los poderes de que disponía el presidente del Reich pasarán al Führer y Canciller del Reich, Adolf Hitler. Él mismo nombrará asu sustituto.” (Decreto Ley del gabinete de Hitler, 1-8-34). En un plebiscito celebrado el 19 de agosto, el noventa por ciento del pueblo alemán votó en favor de la nueva ley.
   El 6 de marzo de 1936 militarizó la Renania alemana violando el nuevo Tratado de Versalles. El pueblo alemán se quedó muy impresionado por los métodos de Hitler, quien a finales de 1936 recibió otro apoyo contundente del voto popular en las urnas, y esta vez la proporción era de noventa a uno a su favor.
   Hitler manifestó la intención de convocar por toda Alemania y Austria el 10 de abril para confirmar la reunificación de Austria con el Reich. Ésta era la pregunta: “¿Acepta a Adolf Hitler como nuestro Führer y, por tanto, acepta la reunificación de Austria con el Reich alemán como se efectuó el 13 de marzo de 1938?” El 99,08 % confirmaron su apoyo.
   Las mujeres le tendían a sus hijos, un acto sencillo que era la mayor muestra de respeto que se podía dar a un dirigente, como Hitler señaló a sus ayudantes.
   Éste era el escudo que protegía a Hitler en 1939: Era un dictador por consenso; a un asesino jamás le habrían perdonado ni comprendido. Esta férrea solidaridad entre el Führer y el pueblo persistió hasta el final, a pesar de lo que han fingido las generaciones posteriores.

(Extracto de EL CAMINO DE LA GUERRA, de David Irving)

David Irving, nacido en Essex, Inglaterra, en 1938,
es hijo de un oficial de la Royal Navy. 
Se formó en la Universidad de Londres, 
donde cursó estudios de física, ciencias económicas
e historia política, y en 1959 pasó a trabajar en la región de
Ruhr como obrero con el objeto de perfeccionar su alemán.
Después de tres años de investigaciones publicó su primer
libro, La destrucción de Dresde, la obra más completa que
existe sobre el ataque aéreo aliado, en el cual perecieron en
una noche más de cien mil personas de la población civil.
Posteriormente publicó otros cinco importantes estudios
sobre diversos aspectos de la Alemania nazi, y en 1977 dio a
conocer el más famoso y discutido de sus libros, La guerra de
Hitler, al que siguieron El rastro del Zorro,
una gran biografía del mariscal Rommel, y El camino de la guerra.


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